Creo que una de las grandes falencia de toda latinoamérica es que las diferentes dictaduras militares (entre otras cosas) han provocado daños severos en los distintos procesos educativos de la sociedad. Y esa falta de formación se ve reflejada a la hora de las elecciones. También es cierto que hoy los candidatos políticos son vendidos como productos comerciales (poseen equipos de asesores de imágen, que le dicen qué hacer, cómo moverse, ´cómo vestir, etc) Y eso produce un daño, porque se pierde el punto de discusión principal que es la capacidad de gobernar.
